sábado, 30 de septiembre de 2017

¿Y el mercado?

La semana pasada, se empezó a rumorear de que la gran obra de remodelación del Mercado Central de Moyobamba, se había quedado paralizada y tirada al abandono; ojo, eran sólo rumores, porque los del Municipio nada no decían, y es que últimamente dar explicaciones a la prensa y ciudadanía en general no es su fuerte. De pronto el lunes de ésta semana, se confirmó la bomba, la empresa constructora abandonó la obra, aduciendo, entre otras cosas, la no respuesta del Municipio sobre el reconocimiento de unas “cosillas" que no estaban en el proyecto inicial; y sin el más mínimo descaro tomaron sus Chivas y se fueron, entonces el municipio tuvo que dar la cara, asumir la responsabilidad y prometer (una vez más) culminar la obra bajo el sistema de “administración directa", hasta fines de éste año; esto es, si es que no hacen cambios estratégicos de último momento (tal y como pasó con la tercera feria del libro).

Ahora bien, ésta gestión municipal, no tenía en mente la construcción o remodelación del Mercado, de hecho el único candidato que lo proponía era Marco Cruzalegui, quién proponía la creación de pequeños mercaditos en cada barrio y un gran mercado de abastos en el terreno del ex aeropuerto de Moyobamba, y el actual espacio se destinaría para otra cosa o, para un mercado modelo con productos de primera necesidad.

Luego del dantesco incendio registrado en un puesto, cercano al mercado, suscitado hace dos años; nos dimos con la sorpresa de que, en efecto, el actual mercado era cualquier cosa menos un mercado, puestos de comida sin las condiciones de salubridad y espacio adecuados, puestos de venta de carne y pescado igual sin las medidas de salubridad, un desorden en la ubicación de los comerciantes, pasadizos estrechos, bullicio y otras irregularidades más; le tomó dos días a la Fiscalía intentar solucionar el problema, se hizo algo, duró poco tiempo y después la misma cantantes. Frente a esa situación, y al considerarlo una bomba de tiempo, l actual gestión municipal optó por “remodelar".

Y se ha insistido, pese a que ya hemos crecido y el espacio es inadecuado, se ha insistido, en construir sobre el desorden; bajo el pretexto de que la remodelación traería consigo la propuesta de un mercado modelo, ordenado, mayores puestos de venta, mejores condiciones para los comerciantes como para los clientes. Se tramitaron préstamos, los mismos que fueron negados, se vieron otras fuentes de financiamiento; se puso en licitación, ganó una empresa cuestionada, se volvió a insistir en contestarla, se dijo que sólo serían tres meses, pero ya va a acabar el año y ésto aún no termina y cómo van las cosas, no creo que termine éste año; ojalá no sea como el hospital, recuerden que ambas obras son de la gestión de Nueva Amazonía.

Pero, ¿se ha hecho un verdadero análisis sobre la situación real del mercado? ¿Son conscientes de los verdaderos problemas que existen? ¿Asegura, ésta remodelación, un verdadero cambio? ¿Estarán dispuestos, los comerciantes, a dejar sus actuales puestos para ser reubicados?. Algunas de las cosas que no se han mencionado es que, para ésta remodelación de accedió a un préstamo bancario ¿Cómo se está manejando? ¿Se están pagando las cuotas? ¿Quienes las están pagando?. Tampoco se ha hablado acerca de las estrategias que están aplicando para bajar los niveles de morosidad, ni mucho menos ha habido un pronunciamiento sobre aquellos que tienen más de un puesto de venta. ¿Está enterado, el Sr. Alcalde, de los negociados que que se hacen con los puestos? ¿Sabe, si quiera, que existe un tráfico ilegal de puestos? ¿Habrá intentado comprar algún puesto? (Ojo que según la ubicación, pueden costar entre S/. 80 000.00 a S/. 100 000.00 soles); los comerciantes, con justa razón han expresado su voz de protesta frente a este nuevo atropello, pero de la cosas antes descritas mudos todos. ¿Será que no les conviene?

Y pese a que los funcionarios municipales digan lo contrario, pero una vez más, se ha demostrado la poca, por no decir nula, capacidad de gestión de quienes hoy están al frente del municipio; el principio de autoridad se ha perdido, en éste caso en particular son los comerciantes los que mandan, a ellos se les pidió reubicarse en otro lado (antes que en el cuchitril que en el que ahora están) para agilizar los trabajos; pero, como éstos hacen lo que quieren y nadie les pone el pare; decidieron quedarse allí, pegado a ellos, si es posible encima de los trabajadores, según ellos que para garantizar la construcción en los tiempos establecidos y según lo estipulado en el expediente, ¡Gran garantía! Veánlos ahora.

¿Y el FEDEIMAN? muy machitos para reclamarle al Gobierno Regional (lo cuál no está mal) pero mudos frente a ésta gestión municipal; espero equivocarme pero, me da la sensación de que el municipio está en quiebra y de que los dirigentes del FEDEIMAN lo saben, pero como quizás el próximo año postulen a la alcaldía, mejor no dicen nada.

¿Cuánto vamos a esperar para reaccionar?

Simplemente KAJOVEPI

sábado, 23 de septiembre de 2017

La Trata no se Trata

Muchas veces, cuando converso con la gente y les pregunto si ¿saben lo que es la Trata de Personas? Suelen responder que “es la forma en la que nosotros tratamos a los demás” o “es la forma en la que los padres tratan/educan a sus hijos” o “es la forma en la que debemos tratar a los turistas” y otro tipo de respuestas similares, pero muy pocas veces indican lo que realmente es.


El delito de la Trata de Personas es un delito que vulnera los derechos fundamentales del ser humano, tales como la Salud, Educación, Trabajo, Identidad, Sexuales; cuyas víctimas puede ser cualquier persona, sin importar su sexo, edad, condición social, raza u otro.


Inicia con la Captación de la víctima, en éste primer paso, el captor va identificando a su víctima, identifica sus habilidades, necesidades, entorno social, cultural; los medios para la captación pueden ser mediante las redes sociales (Facebook principalmente), Ofertas de Trabajo en Restaurantes con sueldos elevados (que por lo general no quedan en la zona sino en otros lugares), Ofertas de estudio, relaciones amorosas…


Una vez que la víctima ha sido captada, ésta es trasladada a otra localidad, con la finalidad de que sea alejada de su familia, entorno social, cultural; durante el traslado se aplican otros medios de coacción (se logra que la víctima no pueda escapar fácilmente) y para ello se quitan los documentos de identidad, celulares, se recurre al chantaje o la amenaza y a la violencia física y se promueve la dependencia de sustancias tóxicas –drogas, alcohol-.


Finalmente, ya en el lugar de destino se inicia el proceso de explotación, es decir ¿cuál fue el fin de captar a la víctima? Puede ser la explotación sexual (prostitución o pornografía); explotación laboral; tráfico de órganos; mendicidad; tráfico de niños, niñas y adolescentes; reclutamiento en bandas delincuenciales y otros.


Éste delito, es uno de los delitos más rentables a nivel mundial, pues la víctima deja de ser mirada como “persona” y se convierte en un “objeto” al cual se puede vender y revender, cuántas veces sean posibles, hasta que ya no genere réditos.


Así de duro y cruel es el concepto de éste delito, cosificar a la persona es lo peor que le puede suceder. Y así de duras, son las cifras que se han revelado, por parte de la Defensoría Pública – Ministerio de Justicia, en lo que va del año. Ésta entidad ha atendido 394 casos de trata de personas. De ellos, en el 87% de casos, las víctimas fueron mujeres. Desde el punto de vista geográfico, las regiones de Puno (78) y Cusco (71) son las que presentaron más casos. Le siguen Madre de Dios (32), Piura (31), Tacna (28) y Lima (21).


Según estudios realizados por la ONG Capital Humano y Social, se ha determinado que, en San Martín, las zonas con mayores casos de explotación sexual son: Nueva Cajamarca, Tarapoto y Morales y las zonas con mayores casos de captación de víctimas son: Tocache, Huallaga, Yurimaguas. A su vez, el Ministerio del Interior ha informado que, de las 6 rutas del delito de Trata de Personas a nivel nacional, 4 pasan por San Martín, ya sea como punto de partida, llegada o tránsito.


Frente a éste delito, valdría la pena preguntarnos ¿qué hacemos? ¿cómo ponemos frente a?, pero yo iría un poco más allá y me preguntaría ¿qué tan informados estamos sobre el delito? Sabemos ¿cómo identificarlo? ¿dónde denunciar? ¿cómo denunciar? Sabes ¿con quienes conversa tu hijo/a mediante las redes sociales? ¿Quiénes son sus amigos/as? ¿a dónde va? Sabes si el trabajo que te están ofreciendo ¿es real?


Te animo a informarte un poco más del tema, pero no sólo a ello, sino a estar alerta frente a una situación de peligro y a denunciar a tiempo. No olvides que puedes marcar el 1818 opción 1 para presentar te denuncia, es totalmente gratis y confidencial.


A estar alertas.


Simplemente KAJOVEPI

lunes, 18 de septiembre de 2017

Terrorismo Nunca Más

Durante la presente semana suscitaron dos hechos, que nos ha puesto sobre el tapete la famosa frase “¡Terrorismo Nunca Más!”.


El primer hecho fue la excarcelación de Maritza Garrido Lecca, quien luego de cumplir 25 años de condena por delitos de terrorismo, fue dada en libertad el pasado 11 de setiembre de 2017; días previos a su excarcelación, muchos de los medios de comunicación de alcance nacional (prensa, radio y televisión) empezaron a hacer notas y animar el debate en base a preguntas como ¿Debía salir? ¿Estará arrepentida? ¿Reorganizará Sendero Luminoso? ¿Qué será de nosotros/as?, y claro, era más que lógico que todas esas preguntas generarían varias posturas en relación a dicho personaje, algunas en contra, otras a favor y hay a quienes “no les interesa” pero, ¿Se podía hacer algo más? Es decir, si ya su condena se terminó, ¿Qué más podemos hacer?, ante la justicia ella ha sido procesada, condenada, encarcelada y ha cumplido con su condena y ya no existen razones para que siga en prisión; por muy raro que esto parezca, es el mismo trato que se le da a cualquier reo, luego de cumplir su condena. Aun así, la prensa seguía armando el circo, en torno a esa liberación; con transmisiones en vivo desde la puerta del penal Ancón II, la puerta de la casa de su madre en Miraflores, un informe detallado del “minuto a minuto” con todo lo que ocurría tanto dentro como fuera del penal; ese día, sin querer queriendo, nuestra atención se centró en “la liberación de una terruca”.


Otro de los hechos que ha resaltado ésta semana, en relación al tema del terrorismo, es que el 12 de setiembre se conmemoraron los 25 años de “La Captura del Siglo”; un 12 de setiembre de hace 25 años, miembros del Grupo Especial de Inteligencia del Perú (GEIN), grupo élite de la Policía Nacional del Perú; luego de una ardua labor de seguimiento y mucha paciencia, logró capturar a Abimael Guzmán (Presidente Gonzalo), máximo cabecilla de Sendero Luminoso; con la curiosa característica de que no hubo enfrentamiento, es decir no se tuvo que disparar a nadie, y de ser una actividad tan pero tan secreta que ni siquiera el mismo Alberto Fujimori, Presidente de la República de ese entonces, sabía del hecho, por eso que ese día se encontraba pescando en un río en Iquitos y recién al día siguiente apareció entre las cámaras queriendo quitar protagonismo a quienes lograron su captura. Luego de 25 años de ésta famosa captura, los miembros del GEIN (hoy disuelto por Fujimori, curiosidades de la vida) han sido condecorados; hemos recordó ¿Cómo fue la captura? ¿Qué se hizo? ¿Quién fue el que dirigió el grupo? ¿Cómo fue el proceso? Y cosas así y claro, hoy por hoy, Fujimori y su partido se atribuyen, descaradamente, dicho logro.


Como mencioné al inicio, estos dos hechos han vuelto a traer a nuestras discusiones del almuerzo el controversial tema del “terrorismo”. Y no sólo hemos recordado “La Captura del Siglo”, sino que al mismo tiempo se han rememorado un solo hecho sangriento de esa época, la explosión de un coche bomba en la calle Tarata en Miraflores – Lima, y, como si Lima representaría a todo el Perú, sólo se ha hablado de ese hecho en particular, con entrevistas a las víctimas directas, análisis situacionales y cosas por el estilo; y nos hemos olvidado de los otros hechos sangrientos, que también enlutaron y pusieron en zozobra al Perú, nos hemos olvidado de que Sendero inició sus operaciones con un coche bomba en Ayacucho, nos hemos olvidado de que Sendero mataba a autoridades comunales tildándoles de “soplones”, nos hemos olvidado de que muchos niños han sido raptados para ser parte de ellos, nos hemos olvidado de las tomas de la comisaría en Juanjui, nos hemos olvidado del boicot de las elecciones generales de 1980, de los apagones y las explosiones de las torres de Alta Tensión; nos hemos olvidado del enfrentamiento armado en Dos de Mayo – Sauce, nos hemos olvidado de los ajusticiamientos públicos en Habana, nos hemos olvidado de hechos como los ocurridos en Lucanamarca o Uchurajay, de la muerte Maria Elena Moyano y otras personalidades; nos hemos olvidado de los otros hechos sangrientos suscitados en esa época, para concentrarnos en Tarata Lima; no digo que no debemos pensar en ello, pero es necesario que, si vamos a hacer memoria, nuestra memoria debe ser colectiva y general, de todos los hechos por muy duros que éstos parezcan.


Recuerdo las palabras de un periodista (José Rocha – Radio Exitosa) quien luego de dar pase al reporte “en vivo” desde el penal sobre la liberación de Martiza Garrido Lecca, decía <<…y después de esto ¿Qué? ¿Es necesario llegar a este tipo de excarcelaciones para recién hablar de terrorismo? ¿Por qué no lo hemos hablado antes? ¿Por qué esperar fechas como éstas para hablarlas? No tengamos un doble discurso señores, si queremos hacer conciencia sobre lo que el terrorismo dejó en nuestro país, pues debemos de discutirlo siempre, debemos hacer memoria, y no hablarlo sólo cuando nos acordamos…>>


Coincido con ello, no podemos hablar del tema, sólo cuando nos conviene o cuando se nos quiera sembrar el miedo, el 11 de setiembre se liberó (luego de 25 años) a una “ex terruca” y, al día siguiente, el 12 de setiembre se celebró la captura del Presidente Gonzalo (también luego de 25 años) y entonces me pregunto ¿Qué tanto hemos avanzado en temas de memoria? ¿Qué tanto hemos hecho para que hechos como los ocurridos en la década de los 80 y 90 no se vuelva a repetir? ¿Estamos dispuestos a hablar del tema? ¿Qué no nos permite hacerlo? ¿Creemos que es necesario?, finalizo con la frase que abre el Informe de la Comisión de la Verdad y Reconciliación “un pueblo que no reconoce su historia, está obligado a repetirlo” ¿quisiera que se repita?


Simplemente KAJOVEPI

sábado, 9 de septiembre de 2017

¿Huele a Mundial?

¿Qué tal queridos(as) lectores(as)? Como lo mencioné en su momento, éste espacio serviría para hablar, entre otras cosas, un poco de futbol; y es que, pese a que soy ateo de ese deporte, pero, da la “casualidad” de que las últimas victorias de la selección peruana de futbol, en los encuentros deportivos oficiales, para las eliminatorias rumbo al Mundial de Rusia 2018; han despertado una “pequeña luz de esperanza” entre los/las hinchas.


Lo que más resalta, es la última victoria obtenida frente a su par de Ecuador, en Quito –altura-, un lugar en donde hasta la fecha no había sido posible ganar, pero esta vez lo hicieron; esa victoria nos ha “colocado”, por ahora, en un cuarto lugar en la tabla de posiciones; obviamente, y no lo podemos negar, esa posición también responde a los resultados de los otros encuentros que sostuvieran los otros equipos, por lo que desde mi punto de vista, no es una posición lograda por mérito propio; no es posible que, de 16 partidos jugados, sólo 6 se hayan ganado, 6 perdidos y 4 empatados; el “mérito propio” indicada que de esos 16 partidos, mínimo se hubiesen ganado unos 8, empatado unos 6 y perdido unos 2, cosa que así no se tendría que estar dependiendo de los otros equipos para definir nuestra posición en la tabla. Ahora, regresemos a nuestra ubicación, si esa hubiese sido la última fecha de las eliminatorias, entonces ahora ya se estarían tramitando los pasaportes y visas para viajar a Rusia, pero, no lo fueron, y los partidos que se vienen son bastante –fuertes-; por lo que creo que, en esta ocasión, al mundial NO VAN A IR…


Otra de las cosas que ha traído esta victoria, y cómo es costumbre, ahora se empieza a armar todo un “espectáculo” del partido y de la selección; que si el jugador “x” salió con la mujercita tal; que si el entrenador uso cábalas para el partido; que si es su último partido como entrenador; que si hubiese jugado de esta forma; que si no hubiese salido de su área; que si hubiese entrado tal jugador; que si mejor se hubiesen jugado 120 minutos; que sus cortes de cabello; que es lo que toman, comen, hablan o hacen; que si el Presidente de la República los vio o no; que si Pizarro debe o no regresar; que si la ex de x jugador vio o no el partido; que si el gol fue dedicado a alguien y cuchucientas mil cosas más, similares a éstas. A eso se suma de que los, supuestos bloques deportivos (que sólo hablan de futbol), transmitan y re transmitan y re re transmitan y re re re transmitan los goles; que se repita el “partido histórico”; que se haga un backup de los partidos de antaño; que ya estamos cerca; que todo quien se convierta en comentarista deportivo; y otras cuchucientas mil cosas más, similares a éstas. Sólo espero que el Congreso no emita una norma que Decrete feriado todos los 05 de setiembre, por ser la fecha de la “histórica” victoria.


Y entonces el futbol ha logrado su objetivo: traer alegría sí, pero una alegría disfrazada; llenar los bolsillos de los dueños de las cerveceras; agotar el stock de las camisetas deportivas de la selección; que todo quien quieran tener algo blanquirojo (al menos por los próximos 30 días); que se alimente esa vaga necesidad de tener rivalidades entre “un hincha y el otro”; en pocas palabras, que todo quien hable, o en todo caso, esté pendiente del futbol. Pero ¿tendrá algo de malo hablar, pensar y comer futbol? ¿no nos debe alegra ésta victoria? ¿tan antipático soy?


Yo creo que no tiene nada de malo, alegrarnos con el futbol; muy por el contrario, si ésta victoria puede traer “algo de esperanza”, pues bienvenida sea. Es solo que, me llama la atención el puje que le ponen a algo, relativamente importante, antes que a temas que sí son de interés.


Si nuestras exigencias por la pronta culminación del hospital de Moyobamba, tuviera el mismo eco que un gol de la selección, ¡otra sería la historia! Si nuestra indignación por los altos niveles de corrupción y de la poca capacidad de gestión que existe dentro de nuestro Municipio y Gobierno Regional (incluido todos sus sectores), tuviera el mismo eco que un gol de la selección, ¡otra sería la historia! Si nuestra resistencia a acceder a cobros indebidos para trámites inexistentes, tuviera el mismo eco que un gol de la selección, ¡otra sería la historia! Si nuestra necesidad de contar con un verdadero plan de acción frente a la Inseguridad Ciudadana, tuviera el mismo eco que un gol de la selección, ¡otra sería la historia! Si nuestro compromiso por la preservación de nuestro medio ambiente, tuviera el mismo eco que un gol de la selección, ¡otra sería la historia! Si la lucha que emprendieron los/las docentes para exigir una educación de calidad, que a la larga nos beneficia a todos, tuviera el mismo eco que un gol de la selección, ¡otra sería la historia! Si la lucha que emprendieron los/las doctores del MINSA a favor de promover un servicio de calidad a los/las asegurados(as) del SIS, tuviera el mismo eco que un gol de la selección, ¡otra sería la historia! Si la famosa frase “aumentar a Keiko 500 Eu fazer visita” y “pero tu Alana #$%& no te escaparas” serían investigadas y, tuviera el mismo eco que un gol de la selección, ¡otra sería la historia! Pero también, si nuestras denuncias por esos “pequeños actos de corrupción” –a nivel de funcionarios locales o de menor rango- fueran realmente admitidos y recibieran, el mismo eco que un gol de la selección, ¡otra sería la historia! Y así poco a poco, podríamos ir cambiando, no sólo nuestra historia presente, sino la que pensamos heredar a nuestros/as descendientes.


Es cierto que cada quien es libre de poder elegir sus prioridades; pero también es cierto, que, dentro de nuestra sociedad, existen temas, como algunos que se describen en el párrafo anterior, que deben recibir ese nivel de atención, que la selección recibe.


Simplemente KAJOVEPI

sábado, 2 de septiembre de 2017

Hasta siempre, Mamá Angélica

Desde el año 2003, todos los 28 de agosto, se conmemora el aniversario de la Entrega del “Informe Final de la Comisión de la Verdad y Reconciliación”. Un Informe que refleja la historia negra que le tocó vivir a nuestro país, entre los años 1980 al 2000. Época comúnmente conocida como “la época del terrorismo”.


La Comisión de la Verdad y Reconciliación, fue un grupo de trabajo creado durante el gobierno transitorio de Valentín Paniagua, y cuyo objetivo principal era el de “Recoger los testimonios de aquellas personas que durante el periodo de mayo de 1980 a noviembre del 2000 hayan sido víctimas del conflicto armado interno, independientemente quién fuera su agresor”. Son más de 69720 víctimas (entre desaparecidos y fallecidos) los que se registraron durante esos tres años de investigación, la misma CVR menciona que dicha cifra podía verse superada pues no lograron cubrir la totalidad del país y aún existen testimonios no relevados; el 70% de los mismo tenían como lengua materna otra que no fuera el español (principalmente quechua hablantes); el 86% de las víctimas provenían de zonas rurales o periurbanas (pobreza); los principales responsables de ésta masacre fueron: el Partido Comunista del Perú - Sendero Luminoso; El Movimiento Revolucionario Túpac Amaru, El Estado (Ejército, Policía y otros) y los Grupos Para Militares (Colina, Rodrigo Franco).


Junto con el Informe Final, la Comisión de la Verdad y Reconciliación, recomienda al Estado implementar una serie de programas y normas que, de alguna u otra forma, contribuirían con la tan ansiada Reconciliación Nacional, Memoria y Cultura de Paz; pero claro, el costo de la implementación de dichos procesos, no sólo en términos económicos sino también en términos sociales, serían bastante altos.


Uno de esos altos costos, es precisamente el de la Memoria; nos cuesta aceptar que hechos tan desgarradores, como los que la CVR registra, fueron ciertos y cercanos a nosotros(as); nos cuesta aceptar que no sólo los grupos senderistas como el PCP-SL y MRTA, sino que el Estado también tuvo responsabilidad en los hechos; nos cuesta aceptar que la educación, economía, salud y lo social de ese entonces daban carta abierta a este tipo de rebeliones; nos cuesta aceptar que por mucho tiempo hemos sido doblegados por la delincuencia, por el temor, por las armas; nos cuesta aceptar que nuestras autoridades de ese entonces, lejos de buscar poner un alto al problema, buscaban protagonismos, quizás con la finalidad de poder tener mayores réditos políticos, que les permitan quedarse en el poder; nos cuesta aceptar, que esas “metodologías” de lucha contra el terrorismo eran, al mismo tiempo, nuevas formas de violación a los derechos humanos; nos cuesta aceptar que hemos vivido en medio de prejuicios y de estigmatizaciones y segregaciones entre el cholo, el negro, el serrano y el pituquito alucinado que no tenía idea de lo que pasaba a su alrededor.


Angélica Mendoza de Ascarza, mamá Angélica para los amigos; fue una de las tantas víctimas de ese periodo. Una mujer quechua hablante, a quien el 2 de julio de 1983, sin causa alguna, militares entraron a medianoche a su casa en la capital de Ayacucho, Huamanga, y se llevaron a su hijo Arquímedes, de 19 años, al Cuartel Cabitos, el principal centro clandestino de desaparición y tortura del Ejército, en la misma ciudad. Cuando preguntó por qué se lo llevaban, le respondieron: “mañana
tiene que ser testigo, solo por eso lo estamos llevando”. Le dijeron además que se lo devolverían en la puerta del cuartel.


“Mañana te lo devolveremos” le dijeron, mientras la golpeaban para que dejara de abrazar a su hijo; “mañana te lo devolveremos” le dijeron, mientras Arquímedes era subido a la tolva de la camioneta del ejército; “Mañana te lo devolveremos” le dijeron y nunca más se lo devolvieron. Desde ese entonces mamá Angélica, salió en la búsqueda de su hijo; fue al cuartel de Los Cabitos, en dónde se lo negaron y la golpearon; fue a la PIP (Policía de Investigación del Perú) y a la Guardia Republicana, pero no encontró.


En ese largo y triste caminar, se encontró con otras madres, esposas e hijas que también buscaban, sin obtener respuestas positivas, a sus familiares. En ese largo y triste caminar, encontró restos humanos, cabeza decapitadas, pedazos de cuerpo, ropas destrozadas; pero nunca encontró a su hijo. En ese largo y triste caminar, inició una batalla, que quizás en algún momento pudo haber parecido perdida, una batalla para que El Estado, le diga ¿dónde está su hijo? ¿qué hicieron con él? ¿por qué se lo llevaron? Pero, al mismo tiempo, en ese triste y largo caminar, en el que se encontró con otras mujeres, decidieron dar una luz de esperanza a aquellos(as) niños(as), huérfanos de ese periodo, comenzaron a atenderlos, inicialmente con comida y abrigo, y luego con el soporte necesario para la búsqueda de sus familiares; y es así como fundaron la ANFASEP (Asociación Nacional de Familiares de Secuestrados y Desaparecidos del Perú).


Mamá Angélica, siguió buscando a Arquímedes, nunca desistió de sus misión, misión que le tomó 34 años para poder, de alguna u otra manera, encontrar un poco de Justicia. El 18 de agosto de éste año, en gallos y medianoche, se dio lectura de la sentencia del Caso de Los Cabitos, en donde sólo 2 de los 6 procesados fueron sentenciados, obviamente no es la “gran sentencia”, pero al menos es un paso para lograr justicia. Mamá Angélica estuvo allí, atenta a la lectura de la sentencia, no me imagino su rostro, pero por declaraciones posteriores, puedo deducir que su corazón encontró un poco de paz, pese a que aún no encontró a su hijo.


Mamá Angélica, lamentablemente, por esas cosas del destino falleció un 28 de agosto del 2017; fecha de conmemoración de un informe, del cual hoy poco o nada se dice. Mamá Angélica se nos fue, pero al mismo tiempo nos dejó una gran lección; que no importa el precio, no importa la edad (ella partió a sus 89 años), no importa la condición social, no importa el credo ni el sexo, pero, si hay que luchar por alcanzar la justicia, hay que luchar hasta alcanzarla.


Hasta siempre mamá Angélica, no te pude conocer en persona, pero sé que hoy por hoy, no sólo gozas de la presencia del Señor, sino que también estas disfrutando de la compañía de tu amada Arquímedes, 34 años han pasado y hoy tienes toda una eternidad para disfrutarlos y brindarle tu amor.


Simplemente KAJOVEPI