miércoles, 29 de marzo de 2023

Excusas y más excusas


¿Qué tal mis querid@s lectores? ¿todo bien? Espero que sí.

No sé si a ustedes les pasa, pero, si bien los operativos policiales resultan ser buenos, sin embargo, el exceso de estos y a veces sin justificación alguna, cansa, fastidia y molesta. Si eres alguien que conduce un vehículo en particular, sospecho pensarás en la misma línea que yo.

Hace algunos días, en medio de un operativo, “sorprendía al policía” con un simple pedazo de papel, con un enmicado barato, que tiene datos básicos y una foto descuadrada en la cara y en el adverso, un sello gerencial junto con una enorme firma; efectivamente, es, una licencia “provisional”, que tal parece, será eterna.

Ahora, ¿cómo obtuve una licencia así de ridícula? pues bien, ahora les cuento el martirio que estoy viviendo, desde hace 6 meses, la historia trae consigo una serie de mentiras, excusas absurdas, reprogramaciones, burocracia y pésima calidad de gestión, así como una pequeña parte de hígado, por todos los sinsabores que provoca este hecho.

Inicié mis trámites en el penúltimo día hábil en el que las municipalidades podían emitir licencias (29 de setiembre de 2022); luego de haber cumplido con todos los requisitos, ya solo me quedaba esperar 10 día para recogerla, sin embargo, cuando fui por ella, no me la dieron, sino que, por el contrario, me dieron un documento provisional, acompañado de excusas absurdas que, trataré de parafrasear.

Primera excusa, en octubre del 2022, “no podemos entregarle su licencia, porque la impresora se nos acaba de malograr y la estamos enviando a Lima para su reparación, no se preocupe, aquí le damos este carné provisional, con él no tendrá problemas, además la policía ya está advertida, por lo tanto, normal puede manejar con este documento, vuelva en 30 días y le daremos la licencia”.

Segunda excusa, 37 días después (noviembre de 2022), “aún no reparan la máquina, y sigue en Lima”. Reclamé y me recalcaron, “efectivamente, señor, la máquina aún no ha sido reparada, tiene unas piezas que no encuentran, pero, le aseguro que, en diciembre, ya va a tener su licencia de conducir”.

Tercera excusa, el 03 de enero de este año, “señor, recién hacemos cambio de gestión (pese a que los funcionarios son los mismos de la gestión anterior), aún no sabemos quién será el gerente y, por lo tanto, no podemos darle su licencia, pero, 15 días más y vuelve”.

Cuarta excusa, luego de los 15 días, “señor, la máquina sí, está malograda, pero, nunca la mandamos a reparar, sucede que la gestión anterior ya no quería hacer gastos, porque estaba en cierre, así que no nos hicieron caso cuando la reportamos malograda, y, para evitar problemas, les decíamos eso”.

Quinta excusa, el 31 de enero, “Ahora sí están reparando la máquina, le daremos un nuevo carné, por 3 meses, pero, no será por ese tiempo, sino que a fines de febrero ya puede venir”.

Sexta excusa, el 20 de marzo, “señor, recién en abril vamos a emitir las nuevas licencias, debe esperar hasta esa fecha para su trámite”; le digo que no, que no estoy haciendo un trámite nuevo, que, por el contrario, estoy de camino a recoger una licencia que me deben desde el mes de octubre, que el trámite lo hice dentro de las fechas y que solo es imprimir y ya está; ella, llama a su jefe, sí, el mismo que es responsable de las impresiones, el que firma los carné provisionales, el que me tomó el examen de manejo, el que fue testigo de todas mis visitas a esa oficina, y campante me dice (séptima excusa), “sabe, no estamos autorizados por el ministerio (de transportes) para emitir licencias, recién nos van a habilitar en abril, entonces, lo primero que haremos será imprimir la licencia de ustedes, que son como 200, y luego de los que inicien el trámite en esa fecha… la máquina ya está operativa pero, falta se le hagan algunos ajustes, para la impresión sobre todo, vuelva en abril y listo, tendrá su licencia”.

Regresaré en abril, y no estoy seguro si tendré o no una licencia, de verdad, entre manos. Mientras eso pasa, la policía seguirá fastidiándome, aun sabiendo de este problema, porque, según ellos, ya no debo tener un documento provisional. Los empleados de esa área verán una nueva excusa para justificar su ineficiencia o quizás, como ya me conocen, me esperen con un cafecito para pasar el mal rato…

No es por nada, pero, a veces me gustaría tener esa suerte que tienen ciertos grupos, a quienes sus trámites, licencias o permisos especiales, no sólo se les agiliza de una manera exprés, así, de la noche a la mañana, sino que, además, van acompañados de frases como <<…por especial encargo…>>; lamentablemente, no todos tenemos esa dicha y, estamos destinados a sufrir los estragos de la burocracia, ineptitud e ineficiencia de algunos malos funcionarios del estresante sector público.

Simplemente KAJOVEPI

lunes, 13 de marzo de 2023

Warmisitay

 


<<...eres magia pura, libre como el viento, diosa de los Andes
y entre las estrellas brillas como nadie
en el carnaval, bailando, reina tú serás
mi linda Warmisitay (mi linda Warmisitay)…>>

Las líneas antes indicadas pertenecen a una de las canciones que, tal parece, se ha puesto de moda en los últimos días, esto a raíz de que su autora, Milena Warthon, ganara la “Gaviota de Plata”, en la categoría de mejor canción latinoamericana, en el reciente concurso del Festival de Viña del Mar.

Para quienes no la conocen aún, Milena es una joven cantante y compositora peruana, cuyo estilo de música es el pop andino. Empezó ha hacerse conocida, en plena pandemia, allá por el año 2020, cuando un tanto temerosa lanzó su primer video clip, Agua de Mar, el mismo que se hiciera viral en la red social Tik Tok. Luego, caímos en cuenta que, previo a ese video, ella ya venía haciendo covers de otros cantantes andinos, tenía alguna que otra canción propia pero poco conocida y, además, había participado en el concurso de música “Los Cuatro Finalistas”, allá por el 2018.

Ya a fines del 2021 y durante todo el 2022, su carrera como artista ha ido tomando más peso, de pronto vimos a una Milena más madura en el campo musical, más atrevida a intentar vencer barreras (que aún la persiguen), con canciones más sólidas y de mejor composición. Participó en el concurso “La Voz” y, aunque no ganó, considero que fue como un puente que ha sido enormemente aprovechado por ella para, de alguna u otra forma, fortalecer su carrera de artista.

Warmisitay, la canción que ahora ha hecho de Milena una artista reconocida a nivel internacional es, según ella misma cuenta, fue compuesta en honor a su abuelita Teresita, quien la inculcó a amar lo nuestro, lo andino, sus tradiciones y otros. Dice, que también está pensado en aquella mujer andina que, con su “pollerita roja” disfruta de los carnavales. Milena, en pocas palabras, ha buscado posicionar no solo su estilo musical, sino también a la comunidad andina antes los ojos del mundo.

Sin embargo, mucha gente, que no ven con buenos ojos a Milena y menos su carrera, ha criticado su accionar; más ahora en donde estamos en medio de una crisis política y en donde, curiosamente, es la gente de la sierra la que viene encabezando, por así decirlo, estas protestas; entonces, lo “lógico” hubiese sido ver a Milena en medio de las marchas, comprándose el pleito y, exigiendo, junto a esa gente que dice representar, los derechos que afirman se les ha quitado.

Pero, no fue así, por el contrario, vimos a una Milena concentrada en sus cosas, “escondida en su casa”, promocionando su viaje y participación en Chile y pidiendo la apoyen en el concurso; y, sobre las marchas y el contexto mismo, sólo ha mostrado su apoyo a estas, pero, desde sus redes. Decisión que, para algunos, no ha sido la mejor pues, se ha concluido que, lo único que buscaba y busca es aprovecharse de la cultura andina, sin comprometerse con ella.  

Personalmente creo que, si esa es la mirada, entonces Milena no sería la única artista con esta falta, pues, tenemos en nuestro entorno, a pintores, escritores, músicos, danzantes, actores y otros que, sin ser andinos, también se han aprovechado de esa cultura para posicionar sus expresiones y que ahora, también han estado callados(as) frente al contexto; entonces, ¿no creen que a ellos/ellas también se les debe juzgar?

Por otro lado, dejemos que Milena siga disfrutando de su fama, esperando que esta no haga que se le suba los humos, sino que la permita mantener la humildad que demuestra; sigamos disfrutando de sus canciones, y si no te gusta, pues busca otro artista, eres libre de hacerlo. Sobre el contexto político, hay mucho pero mucho por decir, pero, creo que más que decir, aún queda mucho por hacer.

Simplemente KAJOVEPI



sábado, 4 de marzo de 2023

Es tiempo de cambios


¿Cómo están? Vamos a retomar este espacio, esperando que no sea demasiado tarde para ello.

A partir del 07 de diciembre del 2022, el Perú, como nación, empezó a escribir una “nueva historia”, aunque, si me lo preguntan, y si hacemos una comparación con los cursos del colegio, siento que, por el contrario, ha empezado a escribir un nuevo capítulo del mismo curso pues, esa “historia” de la que hablamos, ya se venía escribiendo desde hace mucho tiempo.

Partamos por el autogolpe de Castillo; yo me pregunto, ¿qué tenía en la cabeza este hombre, para pretender dar un golpe? ¿quién le aseguró que este iba a ser fructífero? ¿cómo se atreve a dar un golpe, sabiendo que no iba a ser vacado?, creo que ni él mismo estaba seguro de lo que hacía, y también sospecho (simples especulaciones personales) que, no imaginó que, en un dos por tres, se quedaría completamente sólo, fundido en su propia ridiculez de espectáculo y sin ningún porvenir.

Lo que me sorprende, no solo fue el golpe, sino, la rapidez con la que el actual congreso actuó para, destituirlo (como correspondía), quitarle la inmunidad, y empezar un juicio político. Sorprende también, la rapidez con la que actuó la policía para, aun estando con inmunidad (porque gozaba de ella al momento de su “arresto”), detuvieran el tráfico, lo arrestaran y lo llevaran a la carceleta; curiosidades de la vida, la prensa estaba por allí. Ni en los ampays de Magaly la cosa estaba tan armada. Pero, no nos centremos en ello. Castillo, claramente dio un golpe y, a partir de esa mala decisión, el capítulo de una nueva crisis política en el Perú empieza a escribirse.

Entonces, esta división entre “izquierda comunista”, “derecha fascista - neoliberal” y los “no quiero saber nada, no me interesa”, que empezó a tener sus primeras “movidas” post elecciones generales 2021, se han profundizado; y, el detalle no sólo está en que se han profundizado, sino que, además, nos ha terminado por dividir en 3 bloques y, cada bloque con sus propios sub grupos.

De por sí, la división de estos grupos, en un estado democrático, como en el que supuestamente vivimos, no debería ser un problema, pues, entre otras cosas, se trata de eso, libertad de expresión, pensamiento, de un espacio plural. El problema radica cuando uno de los grupos quiere imponer sus posturas, necesidades y prioridades, frente a las posturas, necesidades y prioridades de los demás.

Lo ideal es que quienes gobiernan el Estado deben tener la sensatez suficiente a fin de poder responder a todos los grupos de una forma equitativa más que igualitaria, y ello es algo que no estamos viendo.

El contar con un gobierno equitativo, va a requerir, de manera necesaria, cambios; ya sea en la estructura, en las políticas, en la forma de gobierno. Algunos de estos cambios pueden ser simples ajustes o, como lo que ahora se está pidiendo, un cambio total de la carta magna (constitución), esto debido a que se siente que la actual constitución ya de por sí está muy desgastada y sólo responde a intereses de determinados grupos.

Es cierto que los cambios siempre nos van a dar miedo, ansiedad, incertidumbre, nostalgia… cualquiera sea el contexto. Por ejemplo, usted se cambia de casa y entonces va a tomarse un tiempo para adaptarse a el nuevo barrio, los vecinos, los servicios a los que los que puede acceder; pasará lo mismo si se cambia de trabajo, de escuela, de profesión, de ciudad… y el proceso de adaptación puede ser positivo o negativo, según su predisposición al cambio y cómo es que manejas la situación.

Si traemos eso a nuestro actual contexto y en función de los últimos sucesos pues, considero que sí, es necesario un cambio; sin embargo, este no debe ser a razón de una sola postura, sino que, debe responder a todas (perdón por ser insistente en esto); entonces, no sólo debemos exigir el cambio, sino que debemos estar prestos a colaborar con ello, pero, además, a ceder cuando sea necesario; y, ello, es parte del ejercicio de nuestra ciudadanía.

Simplemente KAJOVEPI