martes, 30 de junio de 2020

Aires de San Juan

Así se vive y celebra la Fiesta de San Juan en Moyobamba | Noticias |  Agencia Peruana de Noticias Andina

Uno de los temas un tanto controversiales durante la semana pasada, y que seguirá en estos días (al menos hasta el 30/06), está en relación con la interrogante de que si debíamos o no celebrar nuestra semana turística, y en especial San Juan.

Quizás, la mayor justificación para no celebrar hacía un llamado a: nuestras conciencias, nuestra sensibilidad, nuestro sentir y empatía para quienes están sufriendo, los improperios de esta enfermedad. No podemos, se decía, estar bailando la pandilla y comiendo nuestros juanes, mientras otros están llorando.

Se saluda y aplaude la preocupación, al tiempo en que aceptamos ese llamado de atención. Es cierto que todo está cambiando, y eso abarca también, a nuestra cultura, pues ella también está cambiando, ella también debe adaptarse a los nuevos estilos de vida; y, en ese caminar, hay ciertas costumbres que no podemos perderlas, que debemos seguir practicando, como símbolo de celebración y revaloración de lo nuestro, por muy contradictorio que ello parezca.

Este año, y a iniciativa de algunos colectivos privados quienes, en coordinación con la Municipalidad Provincial de Moyobamba, decidieron, en hora buena, celebrar nuestra 46 semana turística; celebración que, personalmente aplaudí, aunque fue un tanto rara.

Como era de esperarse, esta fue ciento por ciento virtual; las televisoras difundieron, en el horario habitual de la pandilla motivacional, grabaciones de los recorridos de los años anteriores, así como del baño bendito y de las famosas estampas, también es probable que la tarde del 30/06 lo que se transmita sea videos de los corsos pasados; los carros recolectores de basura, aprovecharon sus rutinarios recorridos, para alegrarnos con algo de música típica que salía de sus bocinas; las redes sociales se vieron invadidas con posteo de la pandilla challenge; la tarde del 23 de junio, toda la ciudad olía a juane (obviamente envuelto en hoja de bijao, contradiciendo así, a las indicaciones del MINEDU).

Lo celebramos, y lo seguimos celebrando (termina el 30/06) de una manera distinta; refugiados en nuestras casas, haciendo espacios en nuestras salas o huertas para pandillear un ratito; comiendo nuestros juanes y wawas (sea que nosotros mismos lo hayamos preparado o sea que lo hayamos pedido como delivery).

Aunque la celebración fue distinta, no faltó gente que puso sobre la mesa, esa vieja y absurda discusión por querer saber ¿en dónde es que se prepara el mejor y original juane?; aquí, meteré mi cuchara, porque quiero dar fin a esa discusión; sepa usted que el verdadero juane, el original, el moyobambino, también lleva huevo en su preparación (fin).

Como lo dije en su momento, celebrar, por muy contradictorio que parezca, no tiene nada de malo; y, ello no significa que seamos insensibles, insensatos y ajenos al dolor de otros; por el contrario, cuando pandilleamos, gritamos y nos alegramos junto a aquellos y aquellas que siguen luchando y que están venciendo; y, cuando nuestros pañuelos se levantan hacia el cielo, es para saludar a aquellos y aquellas que ya partieron.

…baila la pandilla, bailo yo también…

Simplemente KAJOVEPI


domingo, 21 de junio de 2020

Papi, tú eres fuerte, yo lo sé

En honor a aquellos que están batallando...


Feliz Día del Padre 2020!: Frases originales para felicitar a tu padre

Acabo de revisar el muro de las cuentas de Facebook de algunos de mis amigos(as) y demás contactos; en la mayoría de ellos, me he encontrado con emotivos saludos para sus padres, hijos, esposos o yernos; he navegado entre frases propias y simpáticas, y una que otra copia barata extraída del Google, acompañadas de las fotos más íntimas de los homenajeados. Pasa lo mismo cuando se revisa los estados de WhatsApp. Mensajes de ida y vuelta, todos con un solo objetivo, decir: Feliz Día Papá.

Estamos celebrando nuestro día, sí, pero, al igual que el día de la madre, lo volvemos a pasar en casa, aislados, sin la posibilidad de poder visitarnos y de poder abrazarnos; sin la posibilidad de poder compartir esa parrilla, ese café o esa chelita en tanto bailamos un cumbión.

Y tenemos como satisfacción, según nosotros, de que no tenemos ese maldito virus inserto en nuestro sistema inmunológico; meditando, creo yo, en lo que nos está sucediendo; renovando, al menos eso espero, nuestros compromisos porque esta nueva normalidad sea mejor a la que estamos dejando o de la que debimos emigrar hace mucho tiempo.

Lamentablemente, las realidades en algunas otras casas o familias son distintas; papá ya no está, papá se ha ido; y no, no se ha ido con otra familia, tampoco se ha ido de juerga, mi mucho menos de viaje sin nosotros.

Se ha ido porque se ha visto obligado a hacerlo, se fue en contra de su voluntad, el virus se lo llevó a una fría cama de un hospital, si acaso encontró una, y no lo podemos visitar. La situación no es nada fácil, todo es incierto, incluso los diagnósticos. 

Los médicos no nos dicen nada, se reservan su derecho al silencio, un silencio que es incomprensible pero que debe ser entendible. Hay quienes se apuestan en las afueras del hospital, porque quieren ver a papi salir triunfante de esa batalla; mientras tanto, hay otros que se recorren las calles de la ciudad para conseguir una cuantas medicinas y ese bendito(maldito) oxígeno medicinal, la desesperación es tal que incluso colocan sus anuncios en sus redes sociales y están dispuestos a pagar los caprichosos costos que los(as) nuevos(as) emprendedores les ponen a esos elementos.

Las puertas del hospital de abren, hay un nuevo soldado que ha vencido (aparentemente) esa batalla, sabemos que la batalla fue dura, pues lo vemos totalmente atrofiado; por un momento la emoción embarga a quienes están en la calle de espera y los obliga a aplaudir, creen que es papá, pero ese, ese no es papá.

Papá sigue adentro, batallando, aferrándose a la vida, no la quiere dejar, tiene muchos planes por delante, siente que la familia los necesita, y sí, lo necesitan, necesitan sus consejos, ocurrencias, su seriedad, su calor y color.

Esas puertas se volvieron a abrir, las noticias ahora no son buenas, un soldado ha caído, lo sabemos porque es la carroza funeraria la que se abre paso. Lloramos, el corazón se destroza; no sólo nos duele la muerte, duele también el hecho de que no podemos despedirlo como se merece; allá se va, sin la posibilidad de poder abrazar ese féretro.

Al inicio de esta pandemia, es probable que más de uno haya pensado que esa realidad que se describe en los párrafos anteriores, era una realidad bastante lejana, tan lejana que no merecía atención y mucho menos cuidado.

En estos últimos días, el departamento de San Martín ha tenido un repunte en casos COVID y en muertes por lo mismo; el alcalde de la provincia de San Martín ya indicó que su cementerio ha colapsado y no soporta más entierros.

Los médicos del Hospital de Moyobamba, nos han indicado que nuestra capacidad ha rebosado; y, los médicos del Hospital de Tarapoto han decidido que su hospital se convierta hospital de referencia COVID, ya no quieren esperar al de la Banda de Shilcayo, que, de momento, ya ha tenido tres fechas de entrega. En cada una de las provincias o zonas, la población, se ha organizado para exigir una planta de oxígeno en la ciudad.

La gente sigue reaccionando, en tanto nuestras autoridades, pese a tener (según ellos) familiares y amigos con la misma enfermedad, no hacen absolutamente NADA por mejorar las condiciones del sector salud y velar porque los servicios seas de calidad.

Han decidido abandonar a la ciudadanía a su suerte, nos llaman troles, inflan costos, direccionan compras, despilfarran el dinero; nunca estuvieron a la altura del cargo, y nunca lo estarán. ¡Incapaces!, eso es lo que son; insensibles, descarados, sinvergüenzas… (y la lista sigue). 

Hoy, día de fiesta, hay muchas familias que lloran la partida de ese ser; hay otras que a diario ruegan que no se vayan. Si ese no es tu caso, cuídate que es el mayor anhelo de tu padre.

Este café, se une al deseo de quienes todavía tienen viva la esperanza, y desde nuestro escritorio queremos decir a esos padres: -sabemos que son fuertes, los esperamos-

Simplemente KAJOVEPI


jueves, 11 de junio de 2020

Esto apesta

Esto es Guerra' regresa a la TV este 25 de mayo pese a ampliación de  cuarentena (VIDEO) | COVID-19 | América TV Espectáculos | Correo

<<…no tengo qué comer. Yo tengo que venir a vender. Es la necesidad porque yo no gano (…) y vas a decir que los de “Esto es Guerra” ¡Ay, ya no tienen para comer después de 3 meses! Ganando 5 mil 8 mil soles (…) tú como siendo prensa, tú sabes la realidad. Acá en Perú nadie es millonario. Los que ganan sueldo mínimo ¿cuántos somos? Y van a venir que nosotros que (…) Oye, llorando ayer porque dice que varios no tienen para comer. Si ellos no tienen para comer, ¿nosotros qué? nosotros peor, pues, señor (…) Estoy poniendo en riesgo mi vida, pero mis hijos tienen que comer…>>

Palabras certeras, precisas y reales, que, una ciudadana limeña expresó ante un reportero (del canal 4 – América Tv), en momentos en que este la invadía con su micrófono y cámara para increparle el por qué salió a vender (a exponerse), si ellxs (lxs vendedores ambulantes) aún no están autorizados para reiniciar sus actividades.

Otro de los detalles que se les ha escapado de las manos, al Gobierno central, en este proceso de reactivación económica, guarda relación directa con la emisión de determinados programas televisivos; el más repudiado y al mismo tiempo amado y aceptado es el reallity Esto es Guerra, quienes volvieron a las pantallas chicas de la televisión luego de 3 intentos fallidos. Valdría la pena volvernos a preguntar si ¿es prioridad?, la respuesta, en definitiva, en un rotundo ¡NO! Pero si esta es la respuesta, entonces ¿por qué se sigue emitiendo el programa?

Como bien sabemos, uno de los grupos autorizados para el desarrollo de sus funciones, desde el inicio de la cuarentena, son los medios de comunicación; sí, pero ese permiso es para solamente dar facilidades a aquellos programas y personal que se dedican a brindar información a la población o al menos ese era el ideal para este tipo de permisos. Lamentablemente, algunos medios de comunicación no se han sujetado a ese ideal y, por así decirlo, le sacaron la vuelta a la norma; entonces, amparándose en que son programas emitidos por un medio de comunicación y que los medios están autorizados, se han sacado permisos a diestra y siniestra; en ese sentido, tenemos los programas que tenemos. 

La gente ha criticado el relanzamiento del programa Esto es Guerra, lo cual me parece perfecto, porque no tiene nada de educativo ni de entretenido allí; sin embargo, se siguen consumiendo programas como el de Magaly TV, Tengo Algo que Decirte, El Wasap de JB, Nunca Más, Andrea, el Reventonazo de la Chola y similares.

Todos esos programas dicen ser de entretenimiento; sin embargo, bien sabemos que los conceptos que estos programas tienen sobre el término “entretenimiento” están ligados con: morbo, exposición e invasión de las vidas privadas, denigración de ciertas poblaciones, chistes en doble sentido, cosificación de la mujer y otros. 

Es probable que nuestro berrinche por el retorno de Esto es Guerra se mantenga en pie por una semana más, de hecho, los ánimos ya bajaron un poco en comparación con la semana pasada, pero, eso pasará y la tontería seguirá, invadirá nuestras casas y las llenará de pestilencia. Las marcas auspiciadoras serán las más beneficiadas, sus ventas se incrementarán al mismo ritmo en que los puntos del famoso rating son contabilizados y comparados uno a unos, cifras que bien pueden sentenciar o promover determinado programa. Una de las preguntas que se hicieron en las redes sociales en estos días, decía: “…si los programas educativos del canal 7 (TV Perú) fuesen transmitidos en los otros canales (América TV, Latina, ATV…) ¿los veríamos? ...”

Podemos discutir si los protocolos de bioseguridad se cumplen o no, pero, de nada nos va a servir hacer escándalo por ello; podemos aplaudir la buena labor de estos guerreros, quienes día a día muestran todo su esfuerzo para poder recaudar fondos a favor de familias pobres, pero, de nada nos va a servir. Podemos criticar la pseudo labor periodística que hacen sus integrantes, pero, de igual forma, no nos servirá rasgarnos los vestidos.

Lo que sí servirá, es que tomes tu control, cambies de canal o, mejor aún, apagues tu televisor.

Simplemente KAJOVEPI


jueves, 4 de junio de 2020

El fútbol, ¿es prioridad?

Liga 1 | Presidente de la FPF confirmó que Lima será la única sede ...

En mi columna anterior indicaba que lamentablemente, el gobierno nacional no está apuntando bien, en la priorización de actividades que deben reiniciarse, de hecho, considero que nunca las supo apuntar. 

Para esta nueva convivencia, como el gobierno ha nominado a esta sexta ampliación de la cuarentena, se autoriza el reinicio de actividades deportivas que no impliquen un acercamiento y que, además, estén federadas; lo curioso de ese anuncio es que sólo hizo referencia al reinicio del fútbol peruano; y eso es lo que más me llama la atención, no sólo porque no es prioritario, sino porque ¿por qué necesariamente el fútbol?

Nunca voy a entender, porqué cuando hablan de deportes o de actividades deportivas, sólo tengan que mencionar al fútbol, como si éste fuese la única disciplina deportiva, existente en el mundo; en fin, sigamos con la columna.

Es cierto que a mi no me agrada el fútbol, y ustedes lo saben, pero, sin embargo, también es cierto que no me hago problemas en jugarlo, comentarlo, verlo e incluso visionar resultados; y el resultado que avizoro para esta actividad, en estos tiempos, son desalentadores; jugadores, equipos técnicos, periodistas deportivos e incluso árbitros, expuestos al contagio y con ellos, sus familias; podría incluso considerar a los hinchas aquí, porque aunque los partidos serán sin público, nadie garantiza que no existan “vivos” que se zurren en la norma e ingresen a presenciar los encuentros. De momento, no se ha comentado nada, sobre los protocolos de bioseguridad que se deben aplicar para quienes sean partícipes de esos encuentros, como tampoco se ha esclarecido sobre quiénes asumirán los gastos de alojamiento, alimentación, viajes, exámenes médicos y otros.

Es preciso indicar, que el estado no podría ni debe invertir en ello, pues la Federación Peruana de Fútbol y sus asociados siempre se han definido como entes autónomos, en cuyas decisiones, estructuras y campeonatos nadie puede intervenir, porque una simple intervención significaba la desafiliación inmediata de parte de la FIFA y eso sería un gran golpe para la hinchada, peor que el golpe de estado del dictador Vizcarra cuando cerró el Congreso. Adicional a ello, ¿cómo podemos garantizar el “distanciamiento social” en una disciplina que, al jugarla, se hace todo lo contrario?

Hace un par de semanas, un autodenominado “periodista deportivo”, que además se jacta de ser un excelente exjugador y gran conocedor de las canchas sintéticas y naturales. Intentó minimizar mis cuestionamientos, al indicar que <<…es necesario reiniciar con el torneo pues sólo así vamos a saber quiénes nos van a representar en los campeonatos internacionales (libertadores y sudamericana) …>>. 

Lo curioso de los torneos internacionales es que a estas alturas del partido, los mismos ya han sido o suspendidos o reprogramados; la CONMEBOL, por ejemplo, en la quincena de marzo, ya anunció que la COPA AMÉRICA se aplazaba hasta el 2021; la FIFA (máximo ente rector en la disciplina) ha anunciado que organizará un encuentro futbolístico para recaudar fondos que contribuyan a la lucha contra el COVID-19 pero, de momento y por razones de seguridad y de salubridad, aún no define ni fecha ni escenario.

Luego de ese anuncio, aplaudida por una hinchada secuestrada por un campeonato innecesario en estos tiempos; me senté a hablar con un verdadero hombre del fútbol, ex dirigente deportivo, conocedor de los reglamentos y de estrategias, no sólo futbolísticas sino organizativas, sí, mi padre, a quien le doy todos los créditos de la materia. Él, al igual que yo, cuestionaba esa decisión y para nosotros, la mejor opción (que por cierto está en evaluación) es que estos campeonatos se aplacen hasta el próximo año, obviamente, todas las federaciones tendrían que estar de acuerdo; quienes jugarían serían los seccionados del 2019 y ello implicaría una suspensión de los torneos (nacionales e internacionales) del 2020.

Los 60 años que esperó Ricardo Gareca para ir a un Mundial ...

Cierro con las declaraciones de Ricardo Gareca, entrenador de la selección peruana de fútbol, y quien se mostró en total desacuerdo con la reanudación de esta actividad:

<<…a veces escucho y veo que dicen que en Alemania arrancó el fútbol, luego que en España aún no, entonces no arranquemos. A mí me interesa lo que pase en Perú. Hay que dejar de copiar. Cada uno tiene su idiosincrasia, su manera de vivir y sus necesidades. No podemos estar fijándonos qué sucede o esperar a que pase en otro país. Hay que tomar las medidas de acuerdos a las conveniencias que tiene el Perú…>> 

En este contexto ¿nos conviene el fútbol?

Simplemente KAJOVEPI