jueves, 26 de marzo de 2020

Café pendiente


Porque los encuentros o reencuentros, sean memorables.


Vizcarra, mi presi, tu presi, nuestro presi; quien junto a su equipo de prensa y su séquito de Ministros, se han convertido en el nuevo magazine del medio día (creo que a estas alturas del partido, no hay peruano(a) que no deja de verlo); nos acaba de confirmar que nuestro encierro obligatorio se extenderá hasta el domingo 12 de abril de 2020, con todo lo ya aprobado a la fecha y con todo lo que se acaba de aprobar hoy (restricción vehicular, permanecer en casa, aeropuertos cerrados, subsidios, acceso a las CTS, no pago de las AFP, toque de queda…), de hecho que en el transcurso de los días, se aprobaran otras medidas.

Sí, es más que probable que ese discurso no solo haya malogrado tu almuerzo, sino también el resto de tu día, y quien sabe, hasta de tu cuarentena (depende de con quién y cómo la estés pasando); pero, lo ideal no es hacernos hígado, menos en estas circunstancias. Tienes, mejor dicho, tenemos, que verlo por el lado amable, como dijera el Chavo del 8; al menos Semana Santa la pasarás reflexionando y en casa, como se debe, ahora, si tanto quieres “acampar”, pues, ahí está tu huerta, ruega no más que ese día no llueva.

Les contaré, desde que mi hija cursaba su último año de educación inicial, a un grupo de tres mamás, a la profesora y a mí (soy el único hombre en ese grupo) se nos ocurrió reunirnos cada cierto tiempo y de manera rotativa, para poder disfrutar de un cálido café de olla con sus tamalitos, sus pancitos, tacachito o cualquier otra cosa que nos ofrezca, a quien ese día le toque recepcionarnos en su casa; claro, el resto, si gusta puede llevar un vinito o alguna otra cosita.

Como ya les dije anteriormente, el motivo de la reunión es único, disfrutar de ese cafecito caliente; obviamente, con ese café viene agregado la cháchara, los chistes, las ocurrencias y las risas; el café no deja de dar vuelta, y si se acaba pronto, agarramos el vino; solemos terminar pasada la medianoche. En lo personal, no saben cómo los disfruto, puede que incluso, sea lo equivalente a una especie de terapia comunitaria.


Justamente, el último café, lo tomamos días antes de esta cuarentena; podría decir que fue por mi culpa, pues curiosamente, decidimos adelantar la fecha porque, en teoría, yo viajaba por una semana a la capital; sin embargo, en la mañana del mismo día en que nos tomaríamos ese café, me comunicaban que todo se cancelaba.

Probablemente ustedes, como en mi caso, tienen un grupo de amigos, familia, compañeros de trabajo o de juerga, con quienes suelen encontrarse regularmente; probablemente los andan extrañando y, desean que esto acabe pronto, para que puedan salir con ellos(as) e ir a comer, por un trago, una fiesta, dar vueltas por la plaza o visitarse.

Y, si hay algo que estamos aprendiendo de estos días de encierro, es a valorar el tiempo que podamos pasar con ellos(as), sí cuando sales o los visitas ¿cómo la pasas? ¿qué haces? ¿qué memorable queda de ese encuentro? ¿es un encuentro más? O es ¡el encuentro!; a veces, solemos ser mezquinos con quienes están alrededor nuestro y, pese a que tenemos la posibilidad de compartir tiempo juntos, decidimos encerrarnos en nuestra burbuja telefónica.

Pero, otra de las cosas que estamos aprendiendo, es a valorar a quienes tenemos cerca, vale decir con quienes estamos pasando la cuarentena; puede que sean familiares tuyos, pero, a lo mejor ni los conoces lo suficiente. Puede que hayas decidido pasarla con tu “enamorado(a) o novio(a)” y, de pronto te das cuenta que esto de la convivencia, es una muestra real, palpable y cerca de que, no pueden estar juntos un minuto más (y encima la amplían).

Quizás decidiste pasarla con amigos y pues andan fortaleciendo la relación, armando planes en conjunto, concretando sueños, haciendo negocios y cosas así. También es probable que la estés pasando solo(a) y, aparentemente tienes más tiempo para ti y para tus cosas, pero te la pasas durmiendo todo el día.

De lo que sí estoy seguro, es que una vez que pase esto, y todos y todas tengamos la posibilidad de volvernos a ver, de volver a estar cerca, de volver a abrazarnos (porque ya no será un riesgo) o a besarnos, es que vamos a tener unas tremendas ganas de ir por un café o por lo que sea.

Deseo, que ese reencuentro, que ese “café pendiente”, sea distinto a los que hemos tenido hasta hoy; pensando en que podría ser el último de nuestra historia, pero haciendo los esfuerzos suficientes y necesarios, porque sea memorable.  

Simplemente KAJOVEPI

miércoles, 18 de marzo de 2020

#YoMeQuedoEnCasa


Seamos responsables.


En algunas ocasiones, es necesario llegar a medidas extremas como y para que se entienda el mensaje; como cuando le dices a tu hijo(a) “no hagas tal cosa porque te puede ir mal y éste no entiende, entonces optas por castigarle quitándole ciertos privilegios, como el acceso a internet o a un celular o la televisión o a no salir de casa”, lo que se espera, luego de ese castigo, es que se reflexione sobre el error cometido y se cambie de actitud.

Hace no más de 15 días; lo que en su momento se pensó era una cortina de humo, ahora es una cosa seria. Pasamos de tener 01 caso, a 86 infectados (hasta el momento de la redacción de la nota), en menos de 10 días; desde el Gobierno Central se han ido tomando algunas medidas de prevención; como la suspensión de clases, la cancelación de eventos grandes y otros… sin embargo, nos hemos zurrado sobre esas recomendaciones y, lejos de mostrar seriedad en el caso, simplemente hemos generado todo un desorden.

Nos dijeron, se suspende las clases hasta el 30 de marzo y algunos colegios decidieron seguir con las mismas; así como padres y madres que entendieron que esto es una extensión de las vacaciones. Nos dijeron que no eventos superiores a 300 personas; y, de pronto hubo locales y negocios que dijeron, “bueno aceptaremos solo 299 personas”. Nos dijeron “tomen previsiones” y optamos por vaciar los supermercados, acabar con todo el papel higiénico y demás elementos de salubridad.

¿Qué nos ha ocasionado todo ello? incremento de los precios en los productos de primera necesidad, así como en los implementos de salubridad. Multas para las instituciones educativas que decidieron seguir con sus clases. Y, un gran endeudamiento de quienes han comprado desesperadamente, sin pensar en el futuro, haciendo uso y abuso del dinero plástico que tienen en sus bolsillos.

Entonces, frente a este tipo de situaciones, el Estado ha visto por conveniente establecer un estado de emergencia nacional que implica el aislamiento social obligatorio; las previsiones de los que puede y no puede hacer, durante estos 15 días de aislamiento, ya han sido explicados de múltiples formas; se espera que la población haya entendido el mensaje y que, adicional a ello, esté acatando la norma. Recuerden que el avance del virus y, por ende, el levantamiento de ese estado de emergencia, depende de nosotros y nosotras y de nuestra capacidad y voluntad de quedarnos en casa.

Aquí ya no hay opción alguna, aquí solo hay una orden ¡quédese en casa!, evite estar saliendo a cada rato, a no ser que sea necesario (ir al mercado para abastecerse, ir al banco para un procedimiento o ir al centro de labores, siempre y cuando se trate del hospital, laboratorio, clínica, posta, o porque va a brindar servicio de limpieza pública o porque va a atender a personas mayores o con discapacidad, o porque eres periodista, comunicar social y nos tienes que informar, con objetividad, todo lo que ocurre afuera); entonces ¿qué podemos hacer por estos 15 días? (o lo que queda)

Bueno, podría cultivar su huerta, pintar su casa, sembrar o cosechar productos de la huerta, escribir una novela, un libro (uno de los míos ya está en revisión) o un blog (solo espero que no me quiten el puesto), leer un par de libros, practicar un instrumento musical o aprender a tocar uno si desea, si tiene acceso a internet puede ver todas las series  o películas que quiera (ya varias bibliotecas virtuales así como cineastas, han puesto a libre disposición sus servicios: libros y películas, para contribuir con ello).

Si tiene programado un viaje por ocio (vacaciones) reprograme pero no cancele, puede inscribirse en un curso virtual para: aprender a bailar, cocinar, hacer juguetes para sus hijos o sus mascotas e incluso hasta maquillarse; es cierto que no puede visitar a su familia, entonces haga sus videollamadas, o simplemente llámeles por teléfono y chismeen un rato; y si aun así le queda tiempo, tómese todas las siestas que quiera, pero, ¡NO SALGA DE CASA!

Simplemente KAJOVEPI

jueves, 12 de marzo de 2020

¿Feliz Día?

Se debe ¿celebrar o conmemorar?


En estos últimos días, volvió a nuestro coloquio, esa típica frase de saludo, de felicitación; a veces un tanto monótona, otras veces sin sentido, otras veces sin lógica y otras veces solo por cumplir; sí, en aras del 08 de marzo, hemos vuelto a desempolvar nuestros mejores discursos y, les hemos dicho, queriendo o sin querer Feliz Día.

Como bien sabemos, al menos eso creo, el 08 de marzo de cada año, desde 1975; se celebra el Día Internacional de la Mujer; para quienes no tenemos idea del por qué de esa fecha, sólo nos hemos limitado a saludarlas y a rescatar todas esas “bondades femeniles” ¿propios? de las mujeres. Y les hemos dicho Feliz Día por ser: mujeres, lindas, tiernas, encantadoras, coquetas, bondadosas e incluso sumisas; pero, nos hemos olvidado (así parece) de decirles Feliz Día por ser: mujeres luchadoras, aguerridas, triunfadoras, por no darse por vencida fácilmente, por estar dispuestas a generar cambios a cada instante.

Se han organizado incluso: pasacalles, conciertos, tardes de café, exposiciones… es más, algunas instituciones del Estado, colgándose en la “celebración”, han decidido cerrar sus puertas al público para realizar tardes de agasajo en beneficio de ellas; otras entidades han destinado fondos (públicos o de chanchita) para regalarles flores, tazas, cuadros, tortas… en el campo comercial, las tiendas de regalo y las florerías, han armado paquetes especiales para la ocasión, con descuentos incluidos; e incluso, algunos restaurantes, se han atrevido a ofrecer atractivos descuentos si, en medio del grupo de comensales hay, por lo menos, una “bella dama”.

Valdría la pena preguntarnos, si ellas, las protagonistas, realmente quieren que se les celebre de esa forma; valdría la pena preguntarnos a nosotros, los que “agasajamos” ¿estamos haciéndolo bien? ¿este es un día para celebrar? He escuchado a muchas amigas, feministas (y algunas “no tanto”) decirnos hasta el cansancio que el 08 de marzo no es un día para celebrar, sino más bien para CONMEMORAR ¿conmemorar? ¿qué? ¿a quién? ¿cómo?...

Pues sí, conmemorar esa constante lucha que las mujeres emprender a diario, a fin de conseguir una sociedad más justa, equitativa e igualitaria. Una sociedad en la cual se las respete por el solo hecho de ser mujeres y no por temor a que si no se hace (es decir, si no se las respeta) nos pueda ir mal; una sociedad que nos les produzca miedo, que les permita salir a caminar libremente, que les deje ser espontáneas; que nos las violen, que no las maltraten, ni que las quemen, ni mucho menos que las desaparezcan.

Una sociedad que les brinde las mismas oportunidades que nosotros, los hombres, tenemos, en donde: el salario sea digno y equitativo por el mismo trabajo; el acceso a la educación no se rija por el sexo; los servicios de salud de calidad, estén garantizados; la participación política no sea obligatoria, sino abierta.

No solo es decir Feliz Día, es saber por qué lo decimos, pero, sobre todo saber ¿qué estamos haciendo, como sociedad, para que realmente sea un feliz día?


Simplemente KAJOVEPI

miércoles, 4 de marzo de 2020

¡No hay vacantes!, No insista


La demanda estudiantil sigue siendo alta, en comparación con la oferta educativa


Considero que: uno de los principales dolores de cabeza, que como padres y madres tenemos, en cuanto nuestros hijos e hijas inician su vida académica; no solo es la megalista de útiles escolares (en dónde a veces piden cosas innecesarias); o los uniformes, zapatos, zapatillas, busos y otros trajes; sino que, sobre ellos, está la posibilidad de poder conseguir una vacante, en un colegio público.

Vemos, año a año, como en las afueras de las instituciones educativas hay una larga cola de padres y madres de familia, que, decidieron abandonar sus actividades cotidianas para, lograr un cupo para sus hijos e hijas. De más está que, desde la dirección institucional, se emitan escuetos comunicados indicando que no hay vacantes o que las fechas para el otorgamiento de las mismas, aún no está habilitada; porque los padres y madres, igual van a ir a hacer sus colas.

Tampoco sirve que la Defensoría del Pueblo haga trabajos de inspección a nivel de las instituciones educativas para ver si el proceso de matrículas es el adecuado; o si la Dirección Regional de Educación informa que el cobro por reserva de vacantes es, por demás, ilegal; porque, el proceso regular de matrículas, no se va a dar, sino que se harán papeleos para demostrar que sí, pero se priorizará a aquellos y aquellas que han estado en la cola (en algunas ocasiones hasta por más de una noche y con lluvia incluida); los cobros y pagos, igual se van a dar, por parte desesperados padres, que quieren ver a sus hijos e hijas; vistiendo el uniforme escolar. 


En lo personal, considero que el problema no es si una institución educativa cobra o no por inscripción o reserva de vacantes, el problema es que: Hace tiempo la demanda estudiantil superó a la oferta educativa (infraestructura, docentes, materiales…); y, esa es, una realidad que nadie quiere ver y menos atender.

Y entonces ¿Qué vamos hacer? ¿Decirle a los padres y madres de familia que se consigan vacante en otro lado? ¿Qué se vayan a los colegios privados, aun sabiendo que las mensualidades es un gasto adicional, que estas familias no programaron? ¿Se harán de la vista gorda, una vez más, y veremos cómo lo solucionamos el año siguiente?

Hace algunas semanas el Dr. Pedro Bogarín, gobernador regional, acompañado de quien en ese entonces se desempeñaba como Ministra de Educación, Dra. Flor Pablo; afirmaban, con palabras más o menos que: <<…San Martín, como región, tendrá un Buen Inicio del Año Escolar 2020, que ya se completó el presupuesto para el total de plazas docentes que requerimos y, que ningún estudiante se quedará fuera del aula…>> Todo parece indicar que hicieron malos cálculos.

Simplemente KAJOVEPI